En la legislatura porteña, este jueves el oficialismo logró avanzar con una ley que realiza modificaciones a la normativa que regula el juego online. A su vez, sancionó un proyecto de ludopatía, ante las fuertes críticas de la oposición.

La iniciativa que habilita el juego online le permitirá al gobierno de Larreta recaudar 500 millones de pesos más por año. Se contempla el concepto de «ficha limpia» que marca que «las personas con procesamiento firme o elevación a juicio por delitos como la trata de personas, extremismo o tráfico de drogas, personas o armas, lavado de activos, delitos comprendidos en la Convención Interamericana contra la Corrupción o aquellos delitos donde el sujeto pasivo sea la Administración Pública».

Este fue un reclamo de una de las fuerzas que componen Vamos Juntos, la Coalición Cívica, que estima que Cristóbal López podría ingresar en el negocio como así también su ex socio, Federico Achával (Hipódromo de Palermo) y la empresa CIRSA, dueña de los casinos flotantes.

Asimismo, el Parlamento ratificó una resolución de Lotería de la Ciudad Sociedad del Estado (LotBA S.E.), para reglamentaron normas y formas de concesión para operar los juegos de azar “on line”. Las normas prescriben “la definición de estándares comerciales y técnicos y sus respectivos controles, la implementación de políticas de juego responsable y las tareas de prevención en materia de lavado de activos y prevención del terrorismo”.

El proyecto quedó aprobado 39 votos positivos, 4 negativos y 17 abstenciones. Desde la oposición no acompañaron lo propuesto por VJ. El Frente de Todos indicó que «con la regulación del juego online hay un interés del Estado de la Ciudad de avanzar con la habilitación de una actividad que hoy, luego de la transferencia de la Lotería que le hiciera Mauricio Macri como Presidente de la Nación, le genera a la Ciudad un ingreso de aproximadamente 7000 millones de pesos al año. Con la habilitación del juego online se estima que tendrá nuevos ingresos entre 500 y 700 millones de pesos. Estamos de acuerdo en que la Ciudad regule una actividad que ya existe y que en el mundo también está siendo regulada y fijándose límites».

«Pero nos parece lógico que estos límites también contemplen un padecimiento, una enfermedad como es la ludopatía, que destruye la vida de las personas y de sus familias. Desde el bloque del Frente de Todos nos abstenemos porque creemos que falta este abordaje que es el de la Salud, porque las distintas regulaciones deberían tender y priorizar el cuidado de la salud y la prevención del juego compulsivo. Somos conscientes que la actividad genera ingresos importantes para la Ciudad, pero no podemos desconocer que afecta gravemente la salud de las personas que se exponen a ella. En ese sentido hay una tensión que no se pudo resolver en la Ley que trajo el oficialismo, ya que un organismo como LOTBA que regula el negocio, la actividad y los recursos, no puede al mismo tiempo cuidar y proteger la salud mental de las personas», agregaron los legisladores opositores.

Mirada similar brindó Myriam Bregman, quien declaró que «Juntos por el Cambio y sus socios radicales como Carrió, se rasgan las vestiduras en el Congreso Nacional como el Increíble Hulk, bajo la premisa de que solo se deben discutir temas relacionados al Covid. Pero en la Ciudad de Buenos Aires, son los abanderados del mega negocio del juego. Es un verdadero escándalo». Y agregó que «la Izquierda, durante la pandemia, denunciamos que se hayan aprobado las leyes con beneficios para las mega constructoras, endeudar a la Ciudad con jurisdicción en Inglaterra, otra ley para consolidar la flexibilización de los pibes y pibas que trabaja para Rappi, Glovo, entre otros».

Bregman aseguró que «la gente de Carrió cree que puede santificar el juego online porque incorporaron una cláusula de ’ficha limpia’. Para finalizar, afirmó: «Hay que decirlo muy claro: esto no es entretenimiento, no es un ‘juego’. Son criminales que están haciendo negocios con la desesperación de la gente, como se ve en nuestro país y en todo el mundo respecto al aumento de la adicción al juego por factores derivados de la pandemia, como el encierro y la angustia».